Una guía relevante para hacer apuestas electorales

Antes de revisar las apuestas electorales en la carrera actual de EE. UU., debemos preguntarnos: ¿es ético apostar sobre los resultados de las elecciones? La respuesta debe ser sí, si tenemos en cuenta que la política está plagada de juegos de azar para empezar.

Los votantes hacen una gran apuesta cuando eligen a un candidato para el poder, apostando a que el ganador podrá y estará dispuesto a poner en el corazón los mejores intereses de su electorado, en asuntos financieros, legales y sociales. Los votantes también apuestan a que su opción electoral no está más interesada en el enriquecimiento personal o en abusar del poder para subvertir la ley.

El juego no se detiene allí

Las personas y corporaciones ricas no hacen más que apostar cuando donan grandes sumas a candidatos políticos; si la apuesta sale bien, esperan que el titular apoye leyes y políticas que permitan a sus patrocinadores recuperar su participación, con intereses. Cuando los patrocinadores cubren sus apuestas y apoyan a todos los candidatos opuestos por igual, el retorno suele ser mucho mejor que la opción rojo/negro en una mesa de ruleta.

A menudo, los votantes comunes y los financiadores de campañas acaudalados apuestan por resultados completamente opuestos. Cuando un lado gana, el otro lado puede perder mucho. Al revisar los escándalos que surgieron de la interferencia corporativa en los gobiernos de todo el mundo durante las últimas décadas, los ganadores en las apuestas electorales suelen ser los más ricos y los menos comprometidos con la ética. Por lo tanto, no parece más que justo darle al apostador en la calle una oportunidad para ganar algo de dinero con el proceso también.

Revisión de apuestas electorales; ¿Es legal?

Si bien la lógica anterior debería ser más que suficiente para convencer a cualquier observador razonable, especialmente si los observadores razonables son todos apostadores entusiastas, no siempre convence a los legisladores. La situación está bajo revisión en muchos países democráticos de todo el mundo, pero el acceso legal a las apuestas electorales en línea, como ocurre con las apuestas deportivas Chile, sigue siendo una cuestión de reglas diferentes para las diferentes jurisdicciones. Depende de cada apostador determinar las leyes en su estado de origen, antes de registrarse en cualquier sitio de apuestas en línea.